Le debemos mucho a un hígado sano y en buen funcionamiento, pero muchas veces pasamos por alto los factores negativos a los que exponemos a nuestro hígado. Factores que dañan las células hepáticas (hepatocitos) incluyen un estilo de vida desordenado, una alimentación desbalanceada, falta de ejercicio y un trabajo sedentario, alcohol, virus, ciertos fármacos, toxinas en los alimentos (tales como moho), metales pesados y productos anormales del metabolismo. (1)

Los fármacos y el hígado

La mayoría de los fármacos son metabolizados por el hígado, donde son desactivados y desintoxicados. (2) Más de 1000 fármacos y productos naturistas pueden causar daño hepático tóxico. (4)

Hay un grupo de fármacos conocidos como fármacos hepatotóxicos (como ejemplo, uno de ellos es el popular paracetamol) con potenciales efectos tóxicos sobre las células hepáticas.

El daño hepático puede ocurrir:

Factores que predisponen al daño hepático tóxico incluyen:

  • Factores genéticos (ciertas mutaciones genéticas hereditarias que afectan la producción y la acción de las enzimas hepáticas que descomponen las toxinas pueden hacerte más susceptible a la hepatitis tóxica), 
  • Edad (al envejecer tu hígado descompone las sustancias dañinas más lentamente, lo que significa que las toxinas y sus subproductos permanecen en tu cuerpo por más tiempo), 
  • Género (los hombres son más sensibles a ciertos fármacos),
  • Estado nutricional, 
  • Exposición simultánea a varios fármacos,
  • Enfermedades del hígado que no se conocen al momento de las terapias que podrían perjudicar a este órgano.(3)

El alcohol y el hígado

El alcohol es la causa más común de las enfermedades del hígado en los países desarrollados. Ecuador se sitúa como el noveno país con mayor cantidad de consumo de alcohol con 7,2 litros de alcohol puro per cápita por año (OMS, 2014). Las últimas estadísticas del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC, 2014) INEC indican que más de 900 000 ecuatorianos consumen alcohol, el 89,7% son hombres y el 41.8% lo hace de manera semanal.

El hábito de beber una copa de vino o un vaso de cerveza diario por las noches también puede ser una amenaza para nuestro hígado. Las enfermedades hepáticas causadas por el abuso de alcohol incluyen: (6)

Alrededor del 60% al 90% de personas que sufren de enfermedad hepática alcohólica y más del 90% de los alcohólicos tienen hígado graso. (6)

La diabetes y el hígado

La diabetes es una enfermedad crónica que sucede cuando el páncreas no produce suficiente insulina (la hormona que controla los niveles de glucosa en la sangre) o cuando el cuerpo no puede utilizar adecuadamente la insulina que produce.

La Organización Mundial de la Salud calcula que la proporción de la población ecuatoriana con diabetes es de aproximadamente 7.3%, alrededor de 1.3 millones de pacientes. (8)

Ambos tipos de diabetes, tipo 1 y tipo 2, pueden causar complicaciones vasculares y cambios en el funcionamiento del hígado. Se estima que la diabetes conlleva a daños hepáticos en un 28-39% de los casos. (9)

Esto ocurre debido a:

  • Desórdenes del metabolismo de carbohidratos con acumulación excesiva de glicógeno (el hígado juega un rol único en el control de la metabolización de carbohidratos al mantener las concentraciones de glucosa en un rango normal),
  • Metabolización anormal de la grasa y acumulación excesiva de grasa (que pueden causar la EHGNA),
  • Patologías que involucran la vesícula y los ductos biliares (los ductos que llevan bilis del hígado al duodeno).

Sin embargo, la causa más común de resultados anormales en los exámenes de laboratorio que revisan el funcionamiento del hígado en los pacientes diabéticos es la enfermedad del hígado graso no alcohólico (EHGNA).

El sobrepeso y la obesidad no son buenos para el hígado

Las enfermedades hepáticas se asocian principalmente con un consumo excesivo del alcohol. Sin embargo, unos de los mayores enemigos del hígado son el sobrepeso y la obesidad, causados por una alimentación desbalanceada o por el exceso de grasas y una falta de actividad física. La cantidad de personas con sobrepeso u obesidad ha incrementado de forma alarmante en los últimos 20 años. Además de incrementar el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2, hipertensión y trastornos de lípidos, el sobrepeso también tiene efectos negativos sobre el hígado. (10)

Los lípidos y el hígado

Cuando subimos de peso, un exceso de lípidos se acumula en los hepatocitos, causando hígado graso y, en instancias más graves, daño hepático.

La combinación de malos hábitos alimenticios y falta de ejercicio es una amenaza real y seria para nuestro hígado.

La enfermedad del hígado graso no alcohólico (EHGNA) es actualmente la enfermedad hepática más común en los países desarrollados y su prevalencia se ha observado en todos los grupos etarios.

Conoce más sobre la EHGNA y los riesgos asociados con ella en nuestro artículo.


CUIDA A TU HÍGADO TODOS LOS DÍAS CON ESSENTIALE®

Conoce más sobre Essentiale® y su triple acción

Essentiale®

Essentiale® es un producto que no necesita receta médica, creado para personas que sufren de enfermedades hepáticas agudas y crónicas, tales como hepatitis (causada por una infección viral). Contiene 300mg de su ingrediente activo: fosfolípidos esenciales.

Leer más

CONOCE MÁS SOBRE QUÉ APORTA O PERJUDICA A TU HÍGADO